El responsable de la Policía de Investigaciones (PDI) en Reconquista, César Moreyra, se refirió a los reiterados conflictos registrados en Barrio Malvinas y aseguró que se trata de un problema generado por un grupo reducido de familias que “empaña el convivir y vivir del resto de los vecinos que son gente trabajadora”.

“Estuvimos evaluando con la fiscalía, la policía y la jefatura. Venimos trabajando en investigaciones vinculadas a microtráfico y personas que reiteran conductas delictivas y que ya se encuentran bajo proceso judicial. Es un trabajo continuo que necesita seguimiento”, explicó Moreyra.

El funcionario indicó que, según lo manifestado por los propios involucrados al momento de la intervención policial, los enfrentamientos no tienen un motivo específico: “Se molestan entre ellos y lo arreglan entre ellos. El problema es que en el medio quedan vecinos que no tienen nada que ver y que no quieren este tipo de situaciones”.

Moreyra confirmó que ya se produjeron detenciones y que las investigaciones están encaminadas. No obstante, remarcó que la tarea de la policía tiene límites: “Nosotros no somos quienes debemos solucionar este conflicto. Somos una parte de la cadena, hacemos nuestro trabajo, lo hicimos y lo seguiremos haciendo. Pero los mismos vecinos no colaboran: los involucrados no quieren identificarse, denunciar ni testificar, porque sostienen que se arreglan entre ellos. Lo malo es que terminan con la paz del barrio y perjudican a quienes no tienen nada que ver”.